Los automóviles con autoconducción ya no pertenecen solo a la ciencia ficción: la tecnología de vehículos autónomos se disparó en las últimas dos décadas, lo que sienta las bases para un renacimiento de la autonomía en la conducción.
"Vehículos autónomos" es un término genérico que abarca varios tipos distintos de vehículos. Distinguir entre ellos es fundamental para los usuarios particulares, comerciales e industriales por igual. Definiremos la tecnología de automóviles autónomos en la era moderna y exploraremos las tecnologías de autoconducción existentes y teóricas.
5 niveles de conducción autónoma
No existe una forma binaria de determinar si un vehículo es "autónomo" o no. En cambio, estos vienen en múltiples niveles, todos los cuales ayudan a moldear nuestra comprensión de cómo los humanos y los automóviles interactúan para pilotar un vehículo. La escala de automatización de la conducción de la Sociedad de Ingenieros Automotrices debería ayudar a entender qué tipos de vehículos caen bajo la generalidad de la “autoconducción“.
Créditos de la imagen: Sociedad de Ingenieros Automotrices
Nivel 0: piense en el viejo Mustang de su padre o en cualquier vehículo fabricado entre el icónico Modelo T y 1994. El nivel 0 de autonomía no tiene ninguna autonomía o capacidad de autoconducción, en absoluto.
Nivel 1: en 1995, Mitsubishi presentó el primer control de velocidad crucero adaptable en una versión limitada de su modelo Diamante. El control de velocidad crucero adaptativo, control que acelera y frena intuitivamente dependiendo de la proximidad a otros vehículos, se considera el primer paso en la tecnología de conducción autónoma. Un vehículo está dentro del nivel 1 de autonomía si posee un sistema que asiste al conductor mientras pilota el vehículo.
Nivel 2: el nivel 2 de autonomía es la capacidad del vehículo para automatizar tareas, como navegar y acelerar alrededor de un vehículo lento, dirigir y pilotar un automóvil en una autopista o estacionarse automáticamente en paralelo.
Uno de los primeros ejemplos de autonomía de nivel 2 en vehículos de consumo es el Sistema inteligente de asistencia para estacionar (IPAS) de Toyota, que debutó en 2003. Este se convirtió en algo común en muchos vehículos Toyota y Lexus en 2006. A partir de 2020, los vehículos autónomos de nivel 2 son comunes y muchos fabricantes de automóviles venden modelos de vehículos que realizan tareas de autonomía de nivel 2 como la de seguimiento de carril y el sistema anticolisión.
Nivel 3: existe una gran brecha tecnológica entre el nivel 2 y el nivel 3 de autonomía. Los vehículos de nivel 3 deben tener sistemas capaces de controlar todos los aspectos de la conducción en determinadas condiciones, así como la capacidad de comprenderlos. En 2020, los vehículos autónomos más avanzados y de última generación entran en el nivel 3 de autonomía.
En este nivel, realmente el conductor no conduce. En su lugar, monitorea la capacidad del auto para manejar en determinadas condiciones. La autonomía de nivel 3 requiere que el vehículo entienda, procese y ajuste el curso de acuerdo a las condiciones cambiantes. La naturaleza del manejo condicionado de los vehículos autónomos de nivel 3 requiere un enfoque significativamente diferente del control del vehículo que los automóviles autónomos de nivel 2, como las computadoras de inteligencia artificial (IA) que se encuentran en los vehículos Tesla.
Actualmente, la mayoría de los vehículos con autonomía de nivel 3 utilizan “modos“ de autonomía, en los que el usuario puede elegir si desea realizar una conducción autónoma. Para utilizar el modo autónomo, el vehículo debe estar en una situación de conducción sencilla, como conducir en la autopista o pilotar por las calles. Por supuesto, el conductor siempre puede intervenir si es necesario.
La SOTU de vehículos autónomos de nivel 3: el sistema Autopilot (Piloto automático) de Tesla ha sido muy aclamado por su capacidad de conducción autónoma, y todos los modelos de la marca fabricados desde octubre de 2016 vienen de serie con el hardware Autopilot, que tiene la capacidad de conducción autónoma de nivel 3. El piloto automático de Tesla se acciona con las cámaras de alta definición que rodean el vehículo y de un procesamiento de imágenes muy avanzado potenciado por la inteligencia artificial.
El Super Cruise de Cadillac, que se presentó dentro de los modelos selectos en 2018, se enorgullece de conducir en manos libres en autopistas exclusivas de todo el país. Mediante el uso de cámaras, sensores, GPS, wifi y otros sistemas, el Super Cruise permite un control de velocidad crucero adaptable y configurable, y centrado de carril, lo que también permite la conducción a manos libres.
Fabricantes de automóviles como BMW, Audi, Porsche, Ford, Lexus, Toyota y Honda buscan de manera activa sistemas de autoconducción de nivel 3 y superiores. BMW afirma que para 2021 tendrán la conducción de manos libres.
Nivel 4: a medida que nos aventuramos en los niveles teóricos actuales de la conducción autónoma, el conductor se vuelve significativamente menos importante. El nivel 4 de autonomía es lo que muchos consideran “autoconducción total“, aunque el conductor todavía necesitaría algún nivel de interacción con el automóvil, como los robotaxis. La autonomía de nivel 4 ya no es tan descabellada como creíamos, y algunas empresas, incluida Tesla, afirman que sus actuales computadoras integradas pueden soportar la autonomía de nivel 4, excepto futuras actualizaciones de software.
Sin embargo, las reticencias sociales son un obstáculo importante para la adopción de autonomía de nivel 4. En una reciente encuesta de más de 2000 personas, menos del 40 % de ellos dijo que se sentiría un tanto cómodo o mejor con una experiencia de conducción totalmente automatizada. Y solo el 6 % dijo que sería “muy probable“ que compraran un automóvil totalmente automático.
Nivel 5: quizás solo en teoría, la autonomía de nivel 5 permite a un vehículo conducir a cualquier lugar, en todas las condiciones, sin necesidad de un conductor en absoluto. Este nivel de autonomía solo se puede alcanzar en entornos militares e industriales, ya que los vehículos de consumo no necesitan poder circular en las condiciones más extremas o fuera de la carretera. Por el momento, la autonomía del nivel 5 parece aún estar en su fase conceptual.
El futuro de los automóviles autónomos
La tecnología de vehículos de conducción autónoma ha progresado mucho los últimos cinco años, pero la industria automotriz se prepara para una revolución. Una vez que alcancemos la autonomía de nivel 4, surgirán nuevos modelos de negocio para el transporte automotriz como industria. Las empresas de robotaxis como Waymo ya comenzaron a probar el futuro de los servicios de transporte. El mundo del transporte automotriz nunca será el mismo una vez que la tecnología satisfaga el deseo de una conducción totalmente autónoma.